La cocina panameña no es de las más reconocidas internacionalmente, sin embargo, no puede negarse que su comida es deliciosa, fresca y tradicional.
Nuestras manos en la cocina
La habilidad de los panameños para reinventar nuevos platos utilizando la diversidad de recursos naturales autóctonos, le ha dado una nueva dimensión a su gastronomía.
En las costas caribeñas y del Pacífico, existen muchas comunidades indígenas y afroantillanas, por lo que la esencia de sus platos se basa en preparaciones con ingredientes como los mariscos, tubérculos, cocos y frutas tropicales, así como no dejan de estar presentes los sabores picantes.
En cuanto a sus técnicas de cocción, éstas son tradicionales encontrándose muchos platos cocidos directamente al fuego.
Otras dietas
En la zona central del país, predominan las culturas y tradiciones latinas, por lo que su dieta se fundamenta principalmente en platillos hechos con tubérculos, frijoles, cereales como el arroz, frutas, pollo y carne de res y puerco. Podrás encontrar diversidad de salsas y preparados con muchos condimentos y especias.
Las técnicas de cocción también suelen ser rudimentarias, pero en menor grado.
La cocina panameña se caracteriza por ofrecer muchos platos hechos a base de almidones y frituras, un estilo delicioso, pero no tan saludable para el gusto de algunos. Sin embargo, también encontrará ingredientes locales como el culantro, con su sutil sabor a frescura, y sin olvidar las frutas tropicales que son las protagonistas de muchos batidos naturales y cócteles.
Sin lugar a dudas, la cocina panameña ofrece una variedad de platos, bocadillos y bebidas espectaculares que son representativos de la mezcla de culturas y tradiciones que alimentan la rica historia de este país.